Visitas al Palacio del Congreso Nacional de Brasil.
El programa de visitas a este lugar se rige por conceptos que van más allá del turismo, con un enfoque en la educación para la ciudadanía, también tiene como objetivo proporcionar información sobre la historia política de Brasil y el proceso de elaboración de leyes. Pero lo que más llama la atención sin lugar a dudas es el patrimonio artístico y arquitectónico que emanan los edificios del Congreso Nacional.
Todos los días, incluso los domingos y días festivos se ofrecen tours que son conducidos por guías capacitados. No hace falta hacer citas, con excepción de los grupos mayores de 15 personas. Cada año se reciben en promedio, 170 mil visitantes.
Qué se puede ver dentro el Palacio del Congreso.
En las visitas guiadas, el público tiene acceso a las principales áreas del Palacio. La culminación de la sucede cuando se llega a las dos Cámaras, donde los diputados y senadores discuten y votan sobre proyectos de ley.
En las salas y pasillos de la Cámara, se exhiben obras de arte de un valor incalculable. También se puede observar esculturas, pinturas, paneles y otras creaciones de artistas tales como Di Cavalcanti, Athos Bulcão, Alfredo Ceschiatti y Oscar Niemeyer.
En muchos lugares y en el Gabinete de Arte de la Presidencia, se promueven exposiciones de artistas contemporáneos de diferentes regiones de Brasil.
Horario de Visitas.
Todos los días desde las 9 de la mañana hasta las 5 de la tarde. Los grupos acceden al recorrido cada media hora desde Salão Negro. La visita dura aproximadamente 50 minutos. Los martes y miércoles solo se realizan visitas programadas, excepto durante el receso parlamentario.
Es importante saber.
- De lunes a viernes, las bermudas, pantalones cortos y zapatillas están prohibidos para los hombres y las mujeres, incluso en el receso parlamentario. Lo recomendable es vestirse algo formal con camisa y corbata.
- Las bebidas alcohólicas, armas o cualquier objeto que pueda causar accidentes también están prohibidos.
- Los grupos que rebasan las 15 personas deben programar su recorrido.
- Las visitas en lenguas extranjeras (nuestro caso) también se deben programar.
- Las fotografías y la filmación en el interior están permitidas, excepto durante las sesiones plenarias.
- Las visitas siguen diferentes rutas en función del número de visitantes.
