A 194 kilometros de distancia de la capital de Florianópolis, Sao Joaquin también es muy visitado a principios de año, no por el frío, sino por la cosecha de la manzana, la principal actividad económica de la ciudad. Al viajar por caminos de tierra por el municipio, es común ver pequeñas plantaciones de manzanos al lado de las casas de los productores de frutas.
Además de degustar esta deliciosa fruta desde el principio del año y disfrutar del frío del invierno, se puede caminar por la ciudad y ver los lugares más llamativos de San Joaquín, los cuales son:
Monumento Manoel Joaquim Pinto
Escultura en madera y piedra, fue diseñado y realizado por el escultor Élson Outuki. El monumento a Joaquim Manoel Pinto cuenta la saga de los vaqueros que poblaron San Joaquín.
Iglesia de San Joaquín
Ubicado en Praça João Ribeiro, construido enteramente en piedra de basalto, tomado de las colinas cercanas. Su construcción comenzó en 1918 y fue inaugurado en 1935. Cuenta con esculturas realizadas por Elson y Kiyotaka Outuki Nelson Matias de los profetas bíblicos y de Adán y Eva, en el exterior de la iglesia.
Museo de las Artes de San Joaquín
Posee una colección de obras de artistas catarinenses importantes, como Martín de Haro, Rodrigo de Haro, Martorano Tereza, Bathke Yolanda y Susanna Bianchini Scóss.
